Mi aventura con los libros (primera parte)

Los primeros recuerdos que tengo con los libros están en mis primeros años en la secundaria, por esa época había en la casa en donde yo vivía los libros de Ariel Juvenil, en donde pude leer Los Tres Mosqueteros, Moby Dick, Ivan Hoe, Robinso Crusoe, Veinte Años Después, etc., una gran colección que no tenía mas de cincuenta páginas y algunos gráficos para que el público infantil/adolescente los pueda leer, los llamados autores clásicos y que uno debe leerlos de todas maneras.

Otro gran momento está relacionado con las visitas que yo le hacía a mi abuela materna, ya que mi tío, el que vivía con ella, leía esos famosos libros de bolsillo de historias de vaqueros, me acuerdo que ojee algunos y me llamaron mucho la atención, así que compré algunos en un quiosco en la esquina y una vez leídos iba a la Av. Grau y los cambiaba por otros; realmente disfruté mucho las historias de Marcial La Fuente Estefanía, Silver Kane, etc. (realmente ya no me acuerdo de los otros autores) en donde te contaban como el forastero (que antes había sido un pistolero) que llegaba a un pueblo dominado por los “malos” los mataba a todos, se quedaba con la chica, cambiaba de vida y salvaba al pueblo; me pase como dos meses de mis vacaciones de verano leyendo estas historias.

Tenía quince años cuando por medio de un primo leí Cien Años de Soledad de García Marquez, un libro con muchas páginas y con una historia alucinante sobre la vida de la familia Buendía en Colombia de inicios del siglo diecinueve que hay que leerlo de todas maneras; otro libro alucinante que leí fue El Padrino, ese libró me rayó, me imagino que todos conocen la historia de Don Corleone, un capo italiano de la mafia que vive en USA y en donde se puede apreciar la manera en que funciona la corrupción y el contrabando, el crimen organizado, en otro momento hablaremos de la gran película.

Por esa época también llegó a mis manos otro gran libro, La Madre de Gorki, novela ambientada en la época rusa zarista y el triunfo de la revolución bolchevique en Rusia en donde la historia gira alrededor de las peripecias de una madre y de su hijo revolucionario. También leí Así se Templó el Acero de Nicolai Ostrosky, también ambientada en la misma época que habla de la vida de los obreros en Rusia y el surgimiento del socialismo; estos libros me acercaron al socialismo, y sobretodo a muchos de sus postulados.

A los 16 años descubrí a Agata Christie, la gran autora de noveleas policiacas, en donde el gran detective belga Hercules Poirot resuelve grandes crímenes, robos, estafas, otros; lo más alucinante es que todos los libros empezaban con el crimen y desde allí se iban descubriendo los hechos y así se llegaba al culpable, el cual uno nunca se hubiera imaginado, apenas leías las primeras páginas ya no querías dejar de leer, era como un visio; así que a los que quieren ejercitar su mente este tipo de lectura les será muy útil.